Pebble, el reloj inteligente que nació como un proyecto de Kickstarter, ya tiene fecha de salida. Comenzará a repartirse entre los que apoyaron la iniciativa a partir del 23 de enero. Llega con retraso -la idea original de sus creadores era tenerlo disponible a finales del pasado año- pero al menos ya es tiene una apariencia física definitiva.
Pebble resume en cierta forma los problemas que pueden surgir cuando se apuesta por un producto en plataformas de crowdsourcing, cuando se paga por adelantado esperando una serie de características. Sus creadores esperaban fabricar unas 2.000 unidades al mes en un taller en California pero el éxito de la idea, que recaudó varios millones de dólares, les llevó a cambiar por completo la escala de operaciones y sus plazos.
Esta mañana ha tenido lugar la presentación oficial en Las Vegas. Del proyecto original al definitivo hay varias diferencias. La más importante es que Pebble llega al mercado sin aplicaciones de terceros, aunque hay varios proyectos en camino. Al salir de la caja será capaz de mostrar las notificaciones del teléfono en la muñeca. Y la hora, claro. Futuras actualizaciones traerán nuevas funciones.
En esta feria se han visto varios productos similares y es un campo que parece estar generando cada vez más interés. Sony y Motorola han tratado de entrar en este espacio, aunque con poco éxito por ahora, pero creo que no tardaremos en ver a los grandes nombres de la electrónica de consumo probar suerte con modelos parecidos.
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